Querido diario:
Esta semana está siendo muy dura. Todas son duras, pero en las que como en esta tengo más de 4 consultas en una semana me destrozan.
Se suman muchas cosas: la ansiedad que me causa enfrentarme a los médicos (ya me la produce cualquiera por el histórico que llevo); el agotamiento, porque no puedo dormir mis 15, 18, 20 horas al día; el más agotamiento, porque para salir de casa tengo que no comer durante 24-48 horas antes, y cuando se encadenan varios días con consulta se encadenan varios días sin comer, aunque por suerte no paso hambre.
La verdad es que esa es una de las cosas que más me llamó la atención desde el principio pero que los médicos no han dado nunca mucha importancia: puedo estar una semana sin comer que no siento hambre, puedo comer lo de dos días en uno que no siento saciedad… Nunca le he dado muchas vueltas pero me parece muy curioso, no sé.
En fin, sin divagar, que estoy agotado. Lo bueno es que salgo de casa, ya que sólo salgo para ir al médico, y suelo tener entre 5 y 10 visitas al mes, pero cuando se me juntan tantas es mortal, así que no esperes mucho de mí estos días.