Estaba leyendo un hilo de un foro en el que un emprendedor planteaba lo que le frustraba su situación actual en la que tras un fracaso no podía reintentarlo porque necesitaba cubrir deudas, y en los comentarios se generaba un pequeño debate sobre los porqués. Siempre he sido un amante de las causas, de los motivos, de los porqués en todos los aspectos, porque en ellos radica la capacidad de que se replique.
Seguir leyendo en GPMESS.